“La clasificación de la reacción al fuego establece criterios para productos de construcción, no para materiales. Siempre se debe hablar de Productos”

La clasificación en reacción al fuego es clara y no contiene ambigüedades. No es posible emplear como sinónimos los términos “material” y “producto” ya que presentan definiciones diferentes, como recoge la norma europea para la clasificación de reacción al fuego UNE-EN 13501-1Los criterios de clasificación se aplican únicamente a productos. Para ilustrarlo veamos un ejemplo:

Cuando se dispone de un producto aislante de lana mineral desnudo, sin revestimiento, podrá clasificarse como A1 o A2 y será un producto homogéneo. En cambio, cuando a este producto se le añade algún tipo de revestimiento (un papel o  plástico, para modificar las características de permeabilidad al vapor de agua) será calificado como un producto heterogéneo y su clasificación dependerá del comportamiento global de la combinación obtenida.

Es decir, un material no combustible puede dar lugar a productos con alto grado de combustibilidad cuando se añaden capas combustibles (como el ejemplo anterior), y viceversa, un material combustible puede dar lugar a productos de bajo grado de combustibilidad, cuando se añaden capas  no combustibles (por ejemplo un SATE).

A continuación se expone una tabla con las clasificaciones de reacción al fuego de los aislantes más empleados.

ANDIMAT (Asociación Nacional de Fabricantes de Materiales Aislantes)